Café Berlín
Pateando el tablero de los circuitos habituales, Café Berlín Buenos Aires se instala en Devoto y celebra la diversidad en la esfera musical actual con una grilla que incluye a los más destacados artistas de cada género
Marília Camposs
7/12/20232 min read
Cómo es la mítica sala de conciertos madrileña en Buenos Aires
En el barrio de Villa Devoto existe un lugar donde escuchar música en vivo cualquier día de la semana: Café Berlín, un emblema de la cultura en Madrid, también conquistó la noche de Buenos Aires.Desde hace más de tres décadas, el Café Berlín forma parte de la memoria cultural, emocional y nocturna de Madrid. Ahora, la mítica sala de conciertos también está escribiendo su propia historia en la ciudad de Buenos Aires, que comenzó a principios de 2022 y suma un capítulo cada noche, cuando las luces se apagan y comienza un nuevo show.
En sus orígenes madrileños, este reducto musical estaba reservado exclusivamente a los espectáculos de jazz y flamenco; sin embargo, con el correr del tiempo el abanico se fue ampliando también hacia otros géneros como el pop, el blues, el funk, el swing, el soul, el folk y la canción.
Con ese espíritu ecléctico, un sistema de sonido e iluminación de vanguardia y un marcado interés por la experiencia de quienes están arriba y abajo del escenario, el Café Berlín desembarcó en Buenos Aires para hacer lo que mejor sabe hacer: auspiciar noches memorables.
Situado en Villa Devoto, sobre la Av. San Martín y casi en el límite con Av. General Paz, esta sala con capacidad para 180 personas permite vivir la experiencia de la música con una intensidad que no se encuentra en muchas salas porteñas, principalmente por la calidad del sonido y la cercanía entre el público y los artistas.
Al igual que en Madrid, el café es más que un espacio reservado a espectáculos: se convirtió en un punto de encuentro para los músicos que lo frecuentan a diario, tanto para tomar una copa como para subirse a tocar con sus colegas. Cada detalle, desde el sonido, las luces y el mobiliario hasta la programación y la estética del lugar fueron pensados para acompañar la experiencia artística de principio a fin.
Cada mes, en el line up del Café Berlín parece haber una única condición: la calidad musical, acompañada de la originalidad de las propuestas que cada grupo o solista lleva a escena.
Fuente: Elcronista.com
